Barrio Las Lomas – Vecinos

Cacique Qom y vecino de Las Lomas

Los Qom asentados en Las Lomas desde mediados de los ’90 tienen dentro de su organización como comunidad la misma estructura que otras etnias de pueblos originarios. Las comunidades se articulan con diferentes roles, en los cuales, los miembros del grupo elijen un cacique como referente máximo en la conducción de la comunidad.

“El barrio Toba”, como se lo mencionaba a la Comunidad Qom de Las Lomas, comenzó en la zona de calles Padre Vieyra y Espora. En el barrio hubo más de una comunidad, según la pertenencia al lugar de origen en el monte chaqueño del que eran originarios, y de los lazos familiares y de amistad previos a llegar a Santa Fe.

El programa radial “Alma de Barrio”, en ocasión del 12 de octubre de 2005, dialogaba con el referente de una de esos grupos de Las Lomas, el cacique Alberto González. La comunidad que encabezaba llevaba el nombre “qadmayí”, que según Alberto, significa “nuestro hogar, nuestro lugar”. En la nota, el cacique empezaba con el comienzo de esta historia, de cómo llegó del Chaco al noroeste de Santa Fe.

“Yo soy de Chaco, de Castelli, del campo más al norte digo, y era una de las personas que trababa de peón, en las cosechas de algodón”. En la charla radial González daba cuenta del por qué emigraron de su tierra, porque “…cuando llegó el día de la máquina, bueno que los agricultores ocupaban la máquina en la cosecha de algodón, no ocupaban más la personas… así que nosotros los toban nos quedamos sin trabajo”.

Sin embargo intentaron sobrevivir en su lugar, el cacique Toba lo recordaba cuando decía que vendían su artesanía “…hacíamos un recorrido, en Resistencia, Chacho, a veces veníamos a Rosario, en Santa Fe vendíamos mucha artesanía…”. Alberto, en su palabra en castellano impregnada de una sintaxis de su idioma Qom, en pocas letras concluía sobre la llegada a tierra santafesina: “Vinimos acá en Santa Fe y se compra mucha artesanía, que a lo último vinimos con toda la familia, y entonces quedamos acá”.  (Alma de Barrio – LT 10 – 8/10/2005)

Con la simpleza de su sabiduría ancestral, el cacique resumía lo que en otros términos podría sintetizarse como: ante la modernización del proceso productivo del algodón en su lugar de origen, y al no poder incorporarse como mano de obra ocasional no calificada, sin otras oportunidades de inserción laboral que los contemplara, de su propia tierra debieron emigrar para procurarse un ingreso económico de acuerdo a sus capacidades y saberes, por ello la artesanía se transformó en una medio de subsistencia más que en una práctica cultural ancestral.

Pese al desarraigo que representó para los qom/toba emigrar de manera casi forzosa del Chaco a Santa Fe, lograron mantener unida su comunidad en base a la organización social heredada de sus antepasados. Puertas adentro de su grupo, se sostuvieron como comunidad y como individuos, tanto en lo económico como en lo cultural, gracias a ese sentido de pertenencia y esa ligazón entre sus miembros. Sin perder la identidad, sin claudicar en su idioma, los tobas resistieron el desarraigo de la tierra natal al sostenerse a sí mismos con su propia idiosincrasia.

Dentro de la conservación de sus costumbres, la figura de un cacique de la comunidad, encuentra un papel central. Decía sobre este punto a “Alma de Barrio” el cacique Alberto de Las Lomas: “Yo soy cacique hace años… porque formamos un grupo de cuarenta y ocho familias que me eligieron como representante, como cacique que le dicen siempre…”. Recordaba González cómo lo eligieron: “Las familias se reunieron… unas cuántas familias se reunieron y dijeron: ‘por qué no elegimos al González para ser representante’”, y luego destacaba con un velado orgullo, “yo le decía muchas veces a la comunidad… yo no sé qué habrá pasado que me tocaron…”.

Un honor y una responsabilidad era ser cacique para Alberto, así lo valoraba con algo de nerviosismo al hablar, “cuando asumí hace dos años, todo me fue llegando, así me visitaron los fotógrafos, bueno una vuelta estaba también en la radio que me visitaron también, y preguntado siempre como es, como se trabajando, como se organiza”. También para el programa de la emisor universitaria el cacique refería a los trabajos de la comunidad: “de la comunidad nuestra hemos organizado siempre, hemos pensado tener algunos trabajos de la comunidad, pero necesitamos una ayuda, cualquiera de los que manda todo eso, que tenga una ayuda”, y ante la consulta del periodista de qué tipo de ayuda se trataba, Alberto puntualizaba “Mirá… la mamá hemos hablamos siempre el tipo de ayuda… la mamá quería trabajar en taller de costura… otro también artesanía que estamos trabajando, bueno la artesanía necesitamos siempre la ayuda… algunos subsidio para traer todo, o sea para comprar lo que estamos necesitando para hacer la artesanía…”. Ciertamente, los cestos y otros elementos de artesanías confeccionados en especial por las mujeres, son hechos con hojas de palma traídas desde Chaco, porque es el insumo necesario que manejan sus manos.

Para comprender las dificultades de acceder el mercado formal, a la visibilidad del mundo actual, vale citar que en el momento de la nota, año 2005, la comunidad intentó participar en la Feria de Artesanías, pero ante la falta de insumos que necesitaban traer de Chacho, buscaron un aporte económico de la entonces Dirección de Promoción Comunitaria, pero según Alberto, como no pudo conseguir su número de CUIT no logró que le dieran el subsidio.

Y la organización devino, por ejemplo en 2018, las emprendedoras del grupo Qom Alphi, (mujeres qom), que producen y comercializan de manera organizada sus creaciones, con el apoyo de voluntariado de personas que no son de la comunidad.

Los tobas (qom) cambiaron marginalidad del monte por marginalidad de la ciudad. Por ello, el trabajo y la lucha de la comunidad organizada por mejoras en su barrio fue una de los reclamos de aquellos a los que les prometieron un lugar para vivir si dejaban los vagones de la playa de maniobras de la Estación Belgrano de Candioti Norte, y otros a los vagones abandonados de la estación Santa Fe Cambios (hoy Parque Federal). Así llegaron los primeros a Las Lomas y San Domingo, a donde luego llegaron familiares o amigos también en busca de un horizonte de vida.

En 2005, la comunidad “qadmayí” tenía 48 familias como integrantes, pero ninguno de todos ellos tenía entonces un trabajo formal, con aportes sociales, con estabilidad, con sueldo. Sobrevivían gracias a los Planes Sociales –Familias o Jefes y Jefas de Hogar- y de las artesanías que pueden hacer.

Pero las condiciones no eran, ni son, buenas. Por ello, las comunidades toba de la ciudad siempre tuvieron que movilizarse para conseguir mejoras. Pero no sólo cuestiones básicas como calles transitables, agua potable, iluminación pedían, otra cosa que necesitaban, según el cacique era oportunidad de aprender otro oficio para la gente grande. Había por ese tiempo algunas alternativas, por ejemplo mencionaba González para 2005 que “yo lo que estoy trabajando ahora de la quinta, del PROHUERTA… somos tres, estoy yo con mi hermano menor y un abuelito que también está trabajando… y el otro barrio vecino nuestro también está haciendo un curso de capacitación de los… albañilería, y veinte joven, creo más de veinte, treinta joven, que están capacitando de albañilería”.

En cuanto a su pertenencia a la etnia Qom, Toba, la comunidad del cacique Alberto González siempre mantenía su cultura desde la base misma de la constitución del sujeto y la comunidad, desde el idioma. De raíces guaycurúes, el idioma Qom/Toba se conserva en la tradición de los miembros de las comunidades. Así, en 2005, lo mencionaba el cacique del grupo “qadmayí” de Barrio Las Lomas cuando contaba que “Casi la mayoría estamos hablando de la idioma entre los tobas, todos los chicos, los grandes, todos los del barrio nuestro, hablan idioma”. (Alma de Barrio – LT 10 – 8/10/2005)

Pero tradición, cultura de su pueblo originario, no quiere decir que para los tobas educarse, ir a la escuela, tener una profesión, sea algo contradictorio. Así lo mencionaba Alberto cuando decía que “Yo decía a todos los chicos siempre… para el futuro… los chicos tienen que ir a la escuela, pero que no olvide la cultura nuestra”, a lo que agregaba, “yo siempre dije que lástima que la escuela es muy lejana, la Ballarini, sería lindo, y yo siempre voy a pensar así, los chicos cómo no tenemos una escuela que es tan cerquita para todos, porque educación es lo que necesitamos… es tan importante”.

Lo cierto es que en Las Lomas, desde 1991, existe el CER San Martín de Porres dependiente de la Escuela sede de Artes Gráficas, en los grados donde se dictan clase bilingües con maestros idóneos. Pero no menos cierto es que la cantidad de alumnos primarios de la comunidad que allí pueden cursar no alcanza para cubrir la demanda de todos los chicos del barrio Toba.

Atahualpa Yupanqui en el disco “Y pasaban los cantores” dedica un poema a “Los Indios”, y en él parece refleja la mirada de Alberto González, cacique toba en Santa Fe, de sus hermanos Qom de las barriadas de Las Lomas y Santo Domingo. Porque como dice Atahualpa, “desde todos los sitios nos están contemplando”, y a Santa Fe, lo hacen desde esos barrios del cordón noroeste, y desde la mirada de tez morena, cuando ofrecen sus artesanías en cada puerta del centro, o por las calles de la ciudad.

LOS INDIOS  (Atahualpa Yupanqui)

América es el largo camino de los indios.
Ellos son estas cumbres y aquel valle
Y esos montes callados perdidos en la niebla
Y aquel maizal dorado.

Y el hueco entre las piedras, y la piedra desierta.
Desde todos los sitios nos están contemplando los indios.
Desde todas las altas cumbres nos vigilan.
Ha engordado la tierra con la carne del indio.

Su sombra es centinela de la noche de América.
Los cóndores conocen el silencio del indio.
Y su grito quebrado duerme allá en los abismos.
Dondequiera que vamos está presente el indio.
Lo respiramos. Lo presentimos andando sus comarcas.

Quechua, aymara, tehuelche, guarán o mocoví.
Chiriguano o charrúa, chibcha, mataco o pampa.
Ranquel, arauco, patacón, diaguita o calchaquí.
Omahuaca, atacama, tonocotés o toba.

Desde todos los sitios nos están contemplando los indios.
Porque América es eso: un largo camino de indianidad sagrada.
Entre la gran llanura, la selva y la piedra alta.

Y bajo la eternidad de las constelaciones.
Sí. América es el largo camino de los indios.
Y desde todos los sitios nos están contemplando.

Barrio Las Lomas – Vecinos

2 comentarios en «Barrio Las Lomas – Vecinos»

  1. hola gente
    me gusto mucho lo que comentan. Soy de Resistencia Chaco. Me gustó mucho la foto de la abuela toba, me gustaria pintarla o dibujarla, por lo cual solicito vuestro permiso para ocupar la foto. Tambien quisiera saber el nombre de esa mujer. Desde ya muchas gracias

    1. hola gracias por tu mensaje esa foto la obtuvimos de un facebook, esta citada la fuente pero te pasamos por aquí su nombre y quién fue la autora. Rosa Abuela Qom de Santo Domingo – FOTO Marilyn Romero – gracias!

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