EL SUR
Digo 1884. Con diez años y sus padres llegó un día mi abuelo Don Juan Rueda. Venían de Anguiano, Logroño, Castilla La Vieja, pero a los pocos meses La Fiebre hizo que se quedara solo, con la única defensa y arma a su favor: la Lengua Madre.
Por aquí todavía quedaban resabios de frontera. Al unirse con mi abuela no sabían que estaban construyendo y poblando el arrabal. Un día desperté y descubrí que al descampado me lo habían transformado en barrio, que mi abuelo ya no tenía lugar para sus mateos y yeguarizos, corral y caballeriza, que de sus trece hijos tres se murieron en la infancia, y que por las dos cuadras que delimitaban la casa en la cual hemos vivido todos, el tranvía iba y venía.
Pero el Sur de mi infancia tiene un origen mucho más austral.
Mi abuelo Don Juan Antonio Zancada -émulo de los horneros- decía que había construido casas para otros, y que de bancos no entendía, entonces compró dos terrenos en la Costanera y uno en el Barrio Centenario, que recién despertaba.
Con énfasis y como sentenciando, pontificó: “Esto se encuentra a pocas cuadras de la Casa de Gobierno y de la Plaza Mayor, alguna vez habrá de ser Centro”, y vendió los lotes de la Costanera. ¡Feliz ocurrencia la de mi abuelo materno!
A mi padre le habría quedado lejos para conocer y visitar a mi madre, o en los ratos libres con otros muchachos, poder fundar el Club San Lorenzo, a doce cuadras de mi casa. En cuanto a mí, jamás podría haber sido Capitán o tripulante de aquellos barcos oxidados, varados sobre barro y arena, inspirado en los relatos de Salgari o en las tardes de cine del Doré. Ni podría haber desafiado a las aguas de la Noria trepado a un alambrado precario y esquivando sus púas, bajo la advertencia de algún vecino: “¡Ojo pibe que estás parado justo a la altura del remolino y del socavón!”.
Pero yo sé de un Sur metafísico y eterno, que los más viejos guardamos en custodia, como arcabuceros ángeles ante un sagrario. Un sur con hombres de cera, graves y sentenciosos, que han venido de otras provincias argentinas, para dejarnos el legado de nuestra Carta Magna. Un coro de chicharras, de órganos y armonios centenarios que en medio de brisas que saben a diamelas, guían a duendes y fantasmas que con las primeras sombras salen de los campanarios, o del fondo de algún aljibe.
Un Sur con tigres que llegan sobre los embalsados que urden las crecientes y saltan sobre los ventanucos de los conventos. Un fraile decapitado camina por los frescos y soleados claustros franciscanos rezando los maitines, y la cabeza de Pancho Ramírez descansa bajo sacra lápida. Casi como el vuelo rasante un pájaro no identificado pasa junto a mí y me saluda con un guiño solamente. Yo sé que se trata de Roberto Lionel González De Luca, alférez santafesino que se perdió en el Mar Caribe en 1965, con el TC48 del que no se supo nunca más.
Hoy es 9 de Julio de 1957 y tengo doce años. Vine a buscar el sol en “El Quillá”. Pedro Candioti está por comer un asado con amigos, pero antes se dará un chapuzón en el lago de su club. Es profesor de Química y dicen q sabe cómo entrar al agua helada. Pamplinas de la gente. Yo digo q a eso lo sabe de puro tiburón nomás. Desde una mesa muy larga, no sé hasta dónde, entre mates y pastelitos que hizo Doña Meche, lo observan sus amigos, que son muchos.
Están los que veo, pero también los que imagino y tendrían que estar. Podría decir Agustín Zancada, José Valentín González, Julio y Manuel Vera Candioti, Julio y Juancito Hachman, Guido Di Pangrazio y Manuel Alcántara, que nos enseñó a nadar a muchos de nosotros. Hombres, que al igual que mi padre, como yo lo haré algún día, partieron sin comprender que la vida también era posible en otros barrios.
Rodolfo Rueda
Santa Fe de la Vera Cruz, (una tarde de junio 7 de MMXV)
Santafesino de veras
Las primeras notas de Ariel Ramírez como pianista, como músico, comenzaron a sonar por el Barrio Sur Nuevo. La historia cuenta que los hermanos Rueda tuvieron la librería a donde iba toda la Escuela Normal, en la esquina de Moreno y Saavedra. En ese local, Don Ariel Ramírez, iba a comprar papel pentagramado, para sus composiciones, sus estudios de la música. Ramírez, recibido de maestro en la Escuela Normal, abrazó el camino de teclas de nácar desde la visita a esa Escuela Normal de un inspector de Música, “dueño de un elegante estilo pianístico llamado Arturo Schianca”, como lo menciona la biografía del compositor de la Misa Criolla y de la música de “Santafesino de veras”, con la letra de otro vecino de Santa Fe nacido en Sastre, Miguel Brascó. (http://www.arielramirez.com/biog.htm)
Ramírez nació en Santa Fe el 4 de septiembre de 1921 y falleció en Monte Grande (Buenos Aires) en febrero de 2010.
SANTAFESINO DE VERAS – Canción litoral
Letra: Miguel Brascó – Música: Ariel Ramírez
Paisano santafesino
nacido en los pajonales
donde beben los sauzales
la luz del Carcarañá…
Crecí donde crece el peje
a orillas de esta ribera,
santafesino de veras
del río Carcarañá.
Me llaman el caburé
y a veces el guaraní,
porque soy de Santa Fe
que es el lugar donde nací.
La polka y el chamamé
se han compuesto para mí,
donde suena la acordiona
ahí me salgo a relucir.
Me mojan los aguaceros
me cortan las pajas bravas,
me queman las sudestadas
del río Carcarañá.
Mi vida son estos pagos
que defienden los chajases
y oscurecen los biguases
y aroma el jacarandá.
Aquí siempre viviré,
la guitarra me dirá,
mi recuerdo en la acordiona
para siempre quedará.
La muerte me ha de llevar
cantando este chamamé.
Si muero será cantando
mi amor por mi Santa Fe.
Tomado de AlbumCancionYLetra.com
Porque soy de Santa Fe
que es el lugar donde nací.
FUENTES BARRIO SUR NUEVO
Diario Santa Fe – (Hemeroteca de la Provincia)
«Alma de Barrio» – Programa de LT10 Radio Universidad de Santa Fe
Diario El Litoral
Diario El Orden – (Hemeroteca de la Provincia)
Diario Santa Fe – (Hemeroteca de la Provincia)
Inventario: 200 obras del Patrimonio Arquitectónico de Santa Fe – U.N.L. – F.A.D.U. – Colegio de Arquitectos de Santa Fe – Fundación Centro Comercial. Santa Fe, 1993
Banco de Imágenes Florián Paucke (http://gobierno.santafe.gov.ar/archivo_general/florian_paucke/)
http://www.santafe.gov.ar/hemerotecadigital/articulo/portada/
«Historia de Santa Fe» – Leoncio Gianello – Editorial Plus Ultra – 1978
“La Modernidad en la ciudad de Santa Fe 1886-1930” – Felipe Cervera – 2012
«El Camino de la Constitución» – Fascículo 3 – «Avenida del Brigadier» – Pascualina Di Biasio – Municipalidad de Santa Fe – Diario El Litoral – 2010
«El barrio sur» – Rodolfo Rueda – 2001 (inédito)
Entrevista a Rodolfo Rueda – 2013 Fernando Pais
http://pochorueda.blogspot.com.ar/
www.escuelanormal32.edu.ar
http://www.cfic.com.ar/historia.php