Dr. Ángel Spedaletti: Médico de niños
Ángel Enrique Spedaletti nació en la pequeña Juncal, una localidad del sur de la provincia de Santa Fe, el 11 de Febrero de 1921. Su padre fue un inmigrante italiano que realizaba tareas rurales, mientras que su madre era argentina.
Desde niño, Spedaletti supo que lo suyo era la medicina. Era un chico inquieto y eso le valió que a los diez años se quemara su cara y parte de su cuerpo jugando con una cocina de campo. Aquel hecho no fue menor en la vida de Ángel, ya que en uno de los viajes que realizaba con su padre para hacerse curaciones, le dijo: “Papá, en el año 1946 voy a ser médico”. Y así fue como el 1°de Agosto de 1946 se recibió en la Universidad Nacional de Rosario.
Su padre desde siempre quiso que su hijo trabajara en Pergamino, pero el destino tenía preparado otra cosa para el flamante doctor. A Spedaletti lo llamó un colega suyo para pedirle que lo reemplace en la localidad de Alejandra. Para llegar hasta allí, el doctor debía pasar por Santa Fe y aquellas horas fueron determinantes en su vida. Cuando Spedaletti intentó comprar el pasaje para viajar hasta Alejandra, en la terminal de ómnibus le comunicaron que no había forma de llegar hasta allá debido a las intensas lluvias que habían caído en esos días.
Sin lugar a dudas, que las lluvias de aquellos días cambiaron la vida del doctor para siempre. En esos días en la capital de la provincia, Ángel visito a uno de los médicos que lo había atendido, el Dr. Cárcamo. Luego de una breve conversación, Cárcamo tomó el teléfono y llamó a quien en ese momento era Ministro de Salud de la Provincia de Santa Fe, el Dr. González Loza, para mencionarle que ya había encontrado a quien era el candidato justo para ocupar el puesto de Médico interno del Hospital de Niños.
El Hospital de Niños se fundó el 7 de Diciembre de 1947, bajo el nombre de “María Eva Duarte de Perón”, y su primer director fue el Dr. Francisco Menchaca. Respecto de la historia de los nombres del nosocomio para niños vale recordar, como lo hace Nessier que “El hospital, después de llamarse María Eva Duarte de Perón, pasó a llamarse Dr. Ricardo Gutierrez, -mientras estuvo en Bulevar Gálvez- y actualmente Dr. Orlando Alassia”. Asimismo, cabe agregar que la génesis del primigenio Hospital de Niños, inaugurado por Eva Perón, fue antes un sanatorio privado expropiado para darle un destino de servicio público.
En enero del ‘48 ve llegar al “flamante Doctorcito” para quedarse a vivir allí por 3 años y medio: “el Hospital fue mi casa, mi lugar de trabajo y aprendizaje, mi escuela y también mi refugio espiritual. Iba a misa allí porque había un grupo de monjas alemanas que nos ayudaban en las tareas del hospital y se celebraba misa en su capilla….pero hay algo más,…..allí también encontré el amor de mi vida, la mujer con quien me casé y viví durante 50 años, hasta que Dios la llevó junto a Él”. Ángel, se casó con Edith Amalia De Petre, que fue la primera Asistente Social del Hospital de Niños de Santa Fe.
Por iniciativa del Dr. Francisco Menchaca, y junto a un puñado de profesionales locales, Spedaletti formó parte en 1949 de la Primera Comisión Directiva de la Sociedad Argentina de Pediatría, Filial Santa Fe. Luego, en 1967, junto al Dr. Milia organiza la Residencia Médica Pediátrica, en base al modelo desarrollado en Buenos Aires por el Dr. Carlos Gianantonio. En el blog del Dr. Raúl Nessier, el profesional destaca que “Por eso será también el creador de los Ateneos Científicos del Hospital de Niños y por eso hoy la Sala de Ateneos del Hospital Alassia, lleva el nombre de Angel Spedaletti”. De esa “incubadora” surgieron grandes pediatras que jerarquizaron y jerarquizan el saber científico pediátrico local, nacional e internacional.
La historia de este vecino de Barrio Candioti se vincula con la del Dr. Orlando Alassia, a quien tuvo como colega de trabajo durante muchos años. Ambos, crearon la Fundación del Hospital de Niños, junto Dr. Santiago Paviotti impulsaron la construcción del Nuevo Hospital de Niños, que fue inaugurado en 1999 en barrio Roma.
Aquel doctor que llegó desde Juncal a la capital de la provincia, durante el año 1998, fue declarado Miembro Honorario Nacional de la S.A.P y la U.N.L. y Sociedad Médica de Santa Fe le otorgan el Premio Benemérito “Dr. Esteban Laureano Maradona”.
Este tipo de distinciones nunca desviaron la vocación de Ángel, que después de 67 años de ejercer la medicina se jubiló para trabajar desde su humilde “Consultorio de Niños” en calle Ituzaingó, de Barrio Candioti. El Dr. Spedaletti falleció en Santa Fe el 27 de diciembre de 2013, a los 92 años.
Con buen tino, su colega Raúl Nessier, cierra su escrito en el citado blog en Internet con una acabada descripción de la particular tarea de los pediatras, pero con palabras encarnadas en la vida del Dr. Ángel Spedaletti:
Los diplomas, los certificados, los premios recibidos, los dibujos que los pequeños le traían de regalo…. si hasta parece escucharse el bullicio y el llanto de los niños que esperan ser atendidos, percibir la angustia de madres y preocupaciones de padres en su sala de espera. Es posible ver su mirada buena y noble, sus manos que curan, sus palabras que consuelan; se puede percibir la alegría por la enfermedad curada, por la muerte derrotada y también el dolor y el desconsuelo frente a lo incurable, a lo irreparable.
Humildad, capacidad, honestidad, generosidad, ética, bonhomía y sobre todo ¡AMOR! Su consultorio es “su santuario” y desde allí les dice a los jóvenes que abrazan su misma vocación: “La ciencia y la tecnología avanzaron mucho en los últimos 50 años, pero lo más importante debe seguir siendo la persona… el ser humano que sufre”.
Sus vivencias llenarían páginas enteras, por eso para plasmarlo en una sola imagen, me adueño de las palabras que expresaron sus queridos discípulos encabezados por el Dr. Juan Carlos Beltramino y el Dr. Santiago Paviotti cuando en Octubre de 1992 y con motivo de su alejamiento del Hospital, le entregaron una plaqueta que dice: “FORJADOR DE MÉDICOS PARA NIÑOS Y HOMBRES PARA LA VIDA”.
