Corazón de maestra, alma de poeta
En una humilde casa del barrio, sobre Urquiza a metros de Suipacha, vivió su vejez apacible y plagada de dibujos y letras María Bárbara Dagatti de Assenza. Maestra por vocación, llevó la educación de los niños más allá de las aulas, hasta llegar a su propio hogar. Su refugio de palabras fue el “Taller Literario José Pedroni”, un espacio de sensibilidad y educación por el arte por donde pasaron cientos de niños y adolescentes santafesinos.
En una publicación del Diario El Litoral de 2010, en ocasión de recibir María Assenza el premio Maestro 2010, se mencionaba: “María nació en 1930 en la localidad de Soledad, departamento San Cristóbal. Pasó su infancia aquí en Santa Fe, traída por su familia. Completó la primaria en la Escuela Beleno y la secundaria en el Colegio Nuestra Señora del Calvario. La docencia la esperaba. Muy joven retornó a su pueblo natal ‘para derramar en los niños todo lo que había volcado en mí la señora Eudelia Giordano, mi gran maestra’, dice, exhalando una honda nostalgia. Vuelve a su mente un borroso y tierno recuerdo”.
En Santa Fe dio clases en la Escuela Nº 38, donde recordaba para el vespertino que “Yo me iba a la casa de los alumnos después de clases, para ayudar a aquellos que tenían dificultades -rememora-. Cuando alguno estaba enfermo yo le llevaba todo lo que se había hecho en el aula, para que no deje de aprender… Era como dar una segunda clase. Yo creía en mis alumnos, y trataba de devolverles la confianza en sí mismos. Mi vocación me llevaba a ser, además de maestra, un poco madre también”. Después llegaría el tiempo de ser maestra en la escuela Beleno, de su barrio, donde creó el himno de la institución. (Diario El Litoral, 11/09/2010)
Un refugio de palabras
Allá por los años ‘60 María Assenza se perfeccionó en las áreas de lengua y expresión, lo que la llevó por sus propias inquietudes a ahondar en la educación por el arte. El taller literario “José Pedroni” la llevaría a recorrer un nuevo camino, de la mano de niños y adolescentes, por senderos de pintura, poesía y cuentos, de música. Luego de su jubilación como docente su dedicación al taller fue completa, y ello la llevó a ocupar primero un espacio en la Biblioteca Pedagógica, y después de alternar en varios lugares, llegar hasta su propia casa, donde su hogar/taller, comenzó a llamarse “La Casa de los Duendes del Arte”, donde perduró durante más de 25 años. (Diario El Litoral, 11/09/2010)
Con el taller todavía funcionando, porque su salud todavía se lo permitía, en el living de su casa decorado por cuadros, pinturas, libros y carpetas con escritos, dibujos y premios, María Assenza decía: “Ahora tengo cincuenta, pero llegué a tener doscientos chicos por semana en el taller, porque tenía a la mañana y a la tarde, de acuerdo a las edades, se iban agrupando, pero hace dos años me tuvieron que hacer una intervención quirúrgica muy importante, y el médico me dijo que no puedo estar todo el día de ese modo…” (Alma de Barrio – LT10 Radio Universidad – 2002)
Ante la pregunta de hasta cuándo pensaba seguir con el taller literario, refugio de palabras y sensibilidad, respondía desde las letras, desde la palabra dicha, en realidad escrita: “¿Viste la novela de Alejandro Casona, “Los árboles mueren de pie”?… yo leí el libro, y en 1951 vi la película, y cuando me preguntan siempre digo eso… que habremos de morir de pie…”. De pie, el árbol florecido más hermoso de Barrio Constituyentes se apagó lentamente en 2013, pero su aroma perdura en los cientos de corazones, ayer niños, hoy hombres y mujeres, que abrevaron en el néctar del alma de maestra y de poeta, de María Dagatti de Assenza.
De su puño y letra, con su voz mansa y clara, en aquel 2002 desgranó estas palabras: “Hubo, hay y habrá un compromiso y un gesto visceral que lo proclama, servir y dar, y fe y amor navegan en mi ser, y esperan el color, suspiran por la luz que buscan allí, afuera. Y los demás ¿sienten así? Quizás si lo supieran serían menos juez con rígidas razones. ¿Yo? Siento así. Mi obligación… sembrar y amar hasta extenuar fuerza y fervor, soñar… sin mí. Pintar… sin mí. Cantar… sin mí. Y ellos dirán lo que es soñar, lo que es pintar, lo que es cantar. Y harán desde su sol, con su color, lo que su voz quiere decir. Tibia canción y amanecer. Y crecerán, replicarán, se librarán, sin timidez proclamarán la gran verdad… porque ellos son, niñez y Dios”. (Alma de Barrio – LT10 Radio Universidad – 2002)
Chicos queridos : con què devociòn seguìa mi madre vuestro programa!!… Agradezco de corazòn que la hayan recordado! …Y con tanto afecto!!
Recìbì muchos mensajes de gente avisàndome que escuche… (Compruebo que vuestra audiencia sigue siendo, merecidamente, muy numerosa!!) Los abrazo con el gran cariño y admiraciòn que tenìa Marìa por ustedes!!!❤
Muchas gracias por sintonizarnos en LT 10 AM 1020 Radio Universidad Nacional del Litoral los sábados por la tarde, de 14 a 16, con nuestro programa «Alma de Barrio». Desde 2002 mantenemos este espacio radial en el que María siempre nos dejaba escritos en el ingreso del antiguo edificio de la radio. Así conversamos con ella. Justamente, «Santa Fe mi Barrio», es una iniciativa surgida de nuestro programa de radio que encontró en este sitio web y gracias a Encuentro el apoyo necesario para exponer la historia de los barrios de Santa Fe, de los santafesinos y de sus instituciones. Muchas gracias! (Fernando Pais)