Hospital de rehabilitación Vera Candioti
La Argentina sufrió reiterados y acentuados brotes de parálisis infantil desde 1906. Sólo entre 1906 y 1932 se produjeron 2.680 casos. En los diez años que transcurrieron entre 1932 y 1942 hubo 2.425 enfermos, cifra que se incrementó durante los años siguientes. En el brote de fines de 1942, la imprevisión signó la actividad sanitaria, puesto que no existía alojamiento para los pacientes, aparatología para los tratamientos ni personal especializado, por ejemplo, enfermeras y kinesiólogos.
Ni las preocupaciones de índole científica, ni el interés legislativo por esta enfermedad, pudieron evitar las consecuencias del brote más alto registrado en la Argentina hasta esa fecha, que afectó a 2.579 personas. La zona más afectada fue Buenos Aires, a la que seguían en número de casos las provincias de Santa Fe, Tucumán y Córdoba. La inquietud médica y política respecto de las consecuencias de dicho padecimiento no radicaba tanto en los índices de mortalidad, sino en la incapacidad permanente para las poblaciones de menor edad, ya que el 71% de los pacientes fueron menores de cuatro años.
Por su parte, en 1945, el gobierno de la provincia de Santa Fe instaló en Sala V del entonces Policlínico Juan Bautista Iturraspe, el Centro Poliomielítico y Ortopédico. El centro de salud estaba bajo la dirección del Dr. Carlos Modesto Vera Candioti, médico especializado en Reumatología y Rehabilitación, quien luego de su graduación universitaria en Rosario, fue becado para cumplir un ciclo de dos años de perfeccionamiento en Estados Unidos, por lo que a su regreso se lo designó para esta labor.
Todo lo aprendido en el país del norte por Vera Candioti lo pudo volcar para ayudar a sus conciudadanos discapacitados para rehabilitarlos, y que de esa manera puedan incluirse, como era su meta, en la sociedad según su vocación y ser valorados por aquellos con quienes estaban en contacto. Asimismo, no sólo asistía a sus pacientes desde el punto de vista médico-físico, sino que atendía muy especialmente el aspecto social y de su entorno, como también ofreciéndoles asistencia espiritual, sin distinción de creencias.
Los santafesinos supieron interpretar su tarea y recibió el apoyo de entidades representativas. En el año 1946, la labor del Dr. Vera Candioti a favor de quienes ocupaban sus pensamientos más profundos y solidarios, los discapacitados, lo impulsó a fundar la filial Santa Fe, de la Asociación de Lucha contra la Parálisis Infantil (ALPI), que hacía poco tiempo se había creado en la Capital Federal.
Carlos Modesto Vera Candioti nació en Santa Fe el 15 de junio de 1908 y falleció, muy joven, el 14 de febrero de 1950 a la edad de 41 años. Así dejó un legado de humanidad, solidaridad y trabajo a favor del prójimo, para sus tres hijos y para toda la comunidad santafesina.
Al año siguiente de la muerte del Dr. Vera Candioti, el 12 de Enero de 1951, el Poder Ejecutivo Provincial, por Decreto nº 339, creó el Centro de Rehabilitación Integral del Incapacitado “Dr. Carlos M. Vera Candioti”, destinado a la reeducación del niño incapacitado, el que funcionaría en el Hospital de Niños, donde antiguamente se encontraba el Centro Anti Poliomielítico.
Para aquella época, el Gobierno Provincial, adquirió un inmueble en calle Buenos Aires 3738, para habilitar el Centro de Rehabilitación en un local propio, con todo el equipamiento necesario para su funcionamiento en buenas condiciones. Sin embargo, el traslado se vio imposibilitado, debido a un juicio por desalojo que duró años, por lo que el Centro debió continuar su labor en precarias condiciones, con escases de camas para hacer frente a la demanda.
Fue recién en 1954 que la Sociedad Pro Rehabilitación al Discapacitado (SPRAI) solicitó al Poder Ejecutivo la habilitación definitiva del local adquirido para la instalación del Centro de Rehabilitación.
Finalmente, en 1956, el Centro fue trasladado al actual inmueble sito en calle Monseñor Zazpe 3738 (ex Buenos Aires), año en el que se produce una nueva epidemia de polio. Luego, en 1957, se destinó un local del Centro para el funcionamiento del Taller de Ortopedias que desde el año 1945 colaboraba en la atención que prestaba el Dr. Vera Candioti, ya que en Santa Fe, se carecía de ortopedistas.
Dos años después, comenzó la atención del enfermo adulto, hasta la actualidad, y de esta manera, se transformó en la única institución oficial que se dedica específicamente al campo de la rehabilitación, y que cuenta con 30 camas para internación, en todo el ámbito de la provincia.
Por decreto nº 12361, en 1960, se modificó el decreto nº 329, mediante el cual el establecimiento Centro de Rehabilitación, adquirió la denominación de “Instituto de Rehabilitación Integral del Incapacitado Dr. Carlos M. Vera Candioti”, en virtud de que la denominación original ocasionaba dificultades administrativas y bancarias.
Por último, en 1993, por resolución nº 924, el Ministerio de Salud, Medio Ambiente y Acción Social, impuso la denominación de Hospital de Rehabilitación Integral del Incapacitado “Dr. Carlos M. Vera Candioti”.
El especial centro de salud de Barrio Alfonso tampoco escapó a la tragedia evitable del año 2003 con la inundación del Río Salado. Para ese entonces, el Hospital se vio muy afectado y dañado, pero luego de dos meses de arduo trabajo reabrió sus puertas, completamente remodelado y funcional. Hoy, la poliomielitis no es una enfermedad de importancia, pero el hospital Vera Candioti si tiene pacientes, y no por esta patología. En realidad, en los comienzos del tercer milenio, el efector se enfoca más a la atención de pacientes con secuelas por episodios cerebrovasculares (ACV), y en especial, a discapacidades y rehabilitaciones derivadas de accidentes de tránsito.
Y como en cada entidad de salud pública, el personal, la gente, desde profesionales médicos a ordenanzas y enfermeras, hacen la diferencia en la prestación de un alivio para la dolencia, pero además, en la contención y ayuda a vecinos que por su condición social y económica sufren -a la par de una patología- la desigualdad y la marginalidad.
