Los clubes de Candioti Norte

Clubes de Barrio Candioti Norte

            Una barriada tan extensa, neurálgicamente ubicada entre tres grandes polos de atracción de mano de obra ferroviaria, con crecimiento exponencial con el aluvión inmigratorio del final del siglo XIX e inicios del XX, no podía estar exenta de tener muchas instituciones deportivas y sociales a lo largo de su historia. Así lo refiere en su trabajo de reconstrucción de memoria urbana Miguel Ángel Dalla Fontana. En el libro que tiene un amplio capítulo para Candioti Norte el autor mencionar que “Los clubes sociales que abundaron en el barrio, abrieron espacios para las distintas manifestaciones culturales y deportivas. A lo largo y a lo ancho de barrio Candioti Norte nos encontramos con una cantidad importante de instalaciones deportivas que da lugar al surgimiento de importantes clubes. Los más antiguos que iniciaron su actividad futbolera fueron Atlético Neri y Central Santa Fe (luego convertido en el club Nacional)”.

Respecto de este club de vecinos se destaca que surge en el 1910 “…el club Central Santa Fe formado por la unión de amigos de Candioti Sur y Norte. Su sede funcionó en distintos lugares, entre ellos, en Ituzaingó y Marcial Candioti (en la antigua fábrica de escobas de la familia Fernández), y en el bar de Nazareno Stringhini (Gob. Candioti y Sargento Cabral). Sin embargo, la práctica del fútbol se jugaba en un decampado ubicado en Luciano Molina, entre Mitre y Alberdi (al este de la Laguna Felipe)”.

La otra entidad señera nació al calor de la iniciativa de su impulsor, y quien le diera nombre, don Oreste Neri. Dice Dalla Fontana: “Este activo personaje de la ciudad de Santa Fe, para entonces, director del diario ‘Nueva Época’ (1923) y gerente del Banco Popular (luego Banco Provincial), por razones de salud viene a afincarse al barrio en 1918, en una vivienda ubicada en calle Lavalle al 3700, e inicia gestiones para que su ‘equipo’ participe en la Liga Santafesina”.

Va de suyo que no fueron las únicas entidades, muchas otras nacieron y se desarrollaron, algunas hasta el presente. Pero los clubes de fútbol del barrio se destacaron, y de ellos se recuerda a Racing, Juventud Unida, Tifón, San Isidro, La Capital, 9 de Julio, Atlanta, River Plate, La Ferroviaria, Lavalle, Miramar, Mitre, Boca Junior, San Martín y La Virginia.

Representativo, por doble partida, es el club La Ferroviaria, ya que encabezados por Enrique Pesarini, un puñado de jóvenes buscan indumentaria, “pensar en grande” al decir de Dalla Fontana, con un campo de juego propio en la barriada. Gracias al apoyo de la recordada panadería “La Ferroviaria”, de Güemes 3923, compraron los arcos y la ansiada pelota de fútbol,  de cuero, cámara y tientos, con tal de llevar la publicidad del comercio. Dice el citado autor que la camiseta fue azul grana por el obsequio de San Lorenzo de Almagro de Capital Federal, logrado vaya a saber por qué socio de La Ferroviaria. Este club nació el 1° de julio de 1947 con sede en Domingo Silva 1342.

Otro club fue “Juventud Unida”, surgido en 1940 en la casa de la familia Scattolini (Juan del Campillo 1768). Gracias al comienzo del relleno de la Laguna Felipe los entusiastas socios fundadores lograron que José Rodríguez, vecino del lugar, les permitiera el uso en comodato de una manzana ubicada en Sarmiento, entre Juan del Campillo y Domingo Silva. Asimismo consiguieron que una empresa constructora emparejara el terreno, lo que convirtió a la cancha de Juventud Unida en una de las preferidas para partidos de la Liga en el barrio. El clásico, según Dalla Fontana, fue contra Ciclón Racing. Este club sumó otras actividades deportivas como el tenis criollo en canchas situadas de manera lindante con Domingo Silva y Necochea.

El Club Atlético Tifón nació el 23 de septiembre de 1941 de la mano de Ricardo Tiburci, Eloy Castro y Nelo Lillini. La entidad llevó ese nombre por una marca de espirales repelentes de mosquitos que auspicio la primera casaca del equipo compradas gracias a un donativo de la empresa. Primero jugaban “de prestado” en la cancha de Juventud Unida, pero con el tiempo lograron tener un predio propio en “Monte Chañar”, en la zona de Calcena y Almirante Brown. Dalla Fontana menciona que el clásico de “Tifón” era con Liverpoll del barrio Sargento Cabral. Con el tiempo compraron un terreno en la zona de Colastiné Sur, cerca del arroyo del mismo nombre, donde se enfocaron en las actividades sociales, las bochas, la caza y la pesca.

CLUB CENTRAL SANTA FE - EL LITORAL 19-3-1931
CLUB NERI - EL LITORAL 1-4-1932
ORESTE NERI
CLUB NERI - EL LITORAL 14-3-1932

El Club La Capital, relacionado al decano de la prensa argentina de Rosario, surgió por intervención de Norberto Molinari, corresponsal el matutino, con un grupo de jugadores de Gimnasia de Ciudadela. Molinari, reza la historia rescatada por Dalla Fontana, obtuvo un apoyo económico mensual del diario para formar y sostener un equipo, que tuvo destacas actuaciones en la Liga Santafesina a fines de los 30’ y que en 1941 fue campeón en la primer división local.

Las entidades no futboleras del barrio Candioti Norte fueron, entre otras, el “Centro Cultural, Recreativo y Deportivo Avellaneda”, nacido el 11 de enero de 1933, asentado en “…una manzana ubicada Avellaneda y Pedro Díaz Colodrero se ubicaban las canchas de bochas, básquetbol y tenis criollo. Contaba con un velódromo para la práctica del ciclismo y atletismo, sin descuidar la práctica de patinaje” (Dalla Fontana “Barrios Candioti Norte, Sargento Cabral, La Lona, Monte Chañar”). De esta entidad, en 1938, surge una entidad vecinal para el barrio.  

CENTRO CULTURAL Y DEPORTIVO ESTEBAN ECHEVERRIA

El club deportivo, social y cultural “General San Marín”, ubicado primero en Lavalle al 4000 y luego en Domingo Silva al 1400, surgió por empuje de Carlos Pautazzo el 17 de agosto de 1950. “La iniciativa –dice Dalla Fontana– tiene origen por la importante presencia de niños que practicaban fútbol en las calles del barrio. Este vecino decide contenerlos y agruparlos para que practiquen en los torneos ‘Evita’, campeonatos realizados en el ámbito nacional por el Partido justicialista”. De las actividades culturales el club San Martín gravitó allá por la primera mitad de los 50’ en la organización de los grandes carnavales del barrio. El memorioso constructor de la historia del lugar ya citado recuerda que “El recorrido del corso se realizaba en calle Río de Janeiro entre Güemes y San Luis. La fiesta era coronada con los bailongos populares en el local del Sindicato de Cerveceros de Santa Fe, ubicado en Alberdi 3926”.

Otros clubes fueron, por ejemplo, el Club Gimnástico de Niños “Enrique Ling” (15 de julio de 1935) que se inició en la antigua sede de la Biblioteca Moreno (de Candioti Sur), pero que luego se asentó en Las Heras 3744 y que fue la génesis del Club de Niños Manuel Belgrano, con el mismo espíritu de enfocarse en el desarrollo espiritual y físico de niños y adolescentes.

Finalmente, en el Barrio Candioti Norte surgió el 1° de junio de 1944 el club Ciclón, en Belgrano 3848, entidad que al poco tiempo, en 1947 se fusionó con Racing, también del barrio,  formaron el club Ciclón Racing F.B.C.

CENTRO CULTURAL Y DEPORTIVO ESTEBAN ECHEVERRIA
CENTRO CULTURAL Y DEPORTIVO ESTEBAN ECHEVERRIA

El último de los clubes de este breve repaso de la mano de Dalla Fontana lleva el registro a la actualidad, con el Club Social Echeverría de tradición por las bochas, que primero funcionó “…en Avellaneda y Pedro Díaz Colodrero (hoy Sarmiento 4068). En su antiguo local, además de las canchas de bochas, patio cervecero, las tardes de domingo ofrecían la representación de radionovelas. Además, por años, se practicó el patín”. En una parte del predio del actual Club Echeverría se encuentra el local de la vecinal Candioti Norte.

                                                                                                                                                                                                                                                       

Club de Bochas en calle Necochea

El deporte bochófilo es una herencia de un juego romano, que evolucionó hacia un ancestro como “la petanca”, también jugado en la península itálica, y de allí que con los inmigrantes italianos, supo llegar a las tierras del sur, y a los barrios de “tanos”, en Santa Fe. Así las cosas, entre bochín, lisas y rayas, bochazos por un “chanta cuatro” (para sacar la bocha contraria y dejar las propias más cercanas que las de los contrincantes), desde los potreros más o menos lisos, hasta las canchas tabicadas, de tierra apisonada y preparada, las “bochas” ocuparon algunos espacios de los nacientes barrios al norte de bulevar.

En el blog de Guillermo Quiroga, “Barrios Santafesinos”, la crónica relata la historia de uno de los clubes de Barrio Candioti Norte que sobrevive en la esquina que lo vio nacer, de la calle que le dio nombre allá por 1939.

Necochea Bochas Club, un rincón amigo

Desde hace 68 años, el Necochea es lugar de reunión de amigos. Algunos, como «los catedráticos» -canillitas habitués- no se pierden una tarde de charlas y vermouth.

En la calle Necochea a la altura del 4060 está el «Necochea Bochas Club». La institución tiene sus orígenes allá por mediados de 1930. Por esos años había un grupo de amigos que eran asiduos concurrentes al «Club Petroleros», que quedaba en Necochea y Luciano Molinas. Pero un día, el buffetero del club, un español, resolvió sacar las canchas de bochas e instalar una cancha de bolos. Fue entonces cuando estos hombres decidieron escribir su propia historia. Y vaya si lo hicieron. Compraron un terreno – en su actual ubicación – ganado en esos tiempos a la «Laguna Felipe» por la gente del Ferrocarril. Es que en ese lugar existía un horno ladrillero, que de tanto cavar para obtener tierra para hacer ladrillos, llegó a las napas y al ingresar el agua a la cava se transformó en laguna.

Así se fueron dando los hechos y si bien ya existían dos canchas de bochas, un ranchito y una buena plantación de paraísos, el 11 de enero de 1939 se fundó formalmente el «Necochea Bochas Club». A partir de esa época todo fue crecer de la mano de los hermanos Poncio, Duclós, Di Bernardo, Orazi y Tozzini, sólo por nombrar algunos. Cabe destacar que los Tozzini ya llevan tres generaciones en el Club, una cuestión no menor, ya que el más chico, hijo del buffetero, Oscar Tozzini, es representante del Necochea en el plantel de bochas.

Varios son los personajes que se reúnen diariamente a despuntar el vicio. Así se arman los juegos de naipes, se juega al chancho, a la básica y al truco. Otros arman sus partidos de dominó o ajedrez. «Pero nunca por plata», aclaran. Se juega, a veces por una comida en el club o por el vermouth, pero jamás por dinero. Miguel Orazi hace de guía y nos muestra el club por dentro. Llama la atención lo grande que es y el orden que se conserva dentro de las instalaciones. «Acá todos colaboran, todo se hace a pulmón», cuenta Miguel, mientras nos muestra unas raras – para nosotros – luces a gas. «Es porque si se corta la luz mientras hacés un locro, todo se echa a perder. Así podemos seguir cocinando porque las luces son a gas.»

En el Necochea son todos hombres. No hay mujeres. Es una decisión de los socios. Y la verdad es que tan mal no les va. «Donde hay minas hay líos», dicen algunos. Lo cierto es que el Necochea Bochas Club «…tiene un imán», dice Miguel «…si entrás una vez, no te vas más».

Guillermo Quiroga

http://barriosantafesino.blogspot.com.ar/2007/03/necochea-bochas-club-un-rincn-amigo.html

Los clubes de Candioti Norte

2 comentarios en «Los clubes de Candioti Norte»

  1. Mí tío es habitué de allí desde hasta 50 años o más . Es icónico en el lugar. Y mujeres no van pero yo siempre fui muy bien aceptada y respetada. Si quieres mas historia sobre ello comunícate conmigo. Excelente nota. Saludos cordiales.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll hacia arriba