Carlos Monzón
Carlos Roque Monzón nació en San Javier el 7 de agosto de 1942. Fue considerado como el máximo representante del boxeo argentino a nivel mundial y uno de los mejores deportistas de la historia argentina. A finales de 1970 alcanzó el título de Campeón Mundial de boxeo en la categoría mediano, título que retuvo hasta el final de su carrera en 1977 cuando se retiró invicto.
Los especialistas en el deporte del pugilato, como la Revista The Ring que lo ubicó en la onceava posición de la lista de los mejores boxeadores “libra por libra”, consideran a Carlos Monzón como uno de los grandes boxeadores de la historia. En 1990 ingresó al Salón Internacional de la Fama del Boxeo, junto a Muhammad Alí y muchos otros.
Monzón fue el quinto hijo de Amalia Ledesma y Roque Monzón, sus orígenes fueron muy humildes, y sus raíces mocovíes. En 1950 la familia se trasladó a la ciudad de Santa Fe y se asentaron en el barrio Barranquitas Oeste. Carlos no terminó la escuela primaria, en tercer grado tuvo que abandonar sus estudios para comenzar a trabajar y así ayudar a su familia. Trabajó en lo que pudo, sobre todo se dedicó a lustrar las botas de los señores en las calles de Santa Fe, a veces aprovechando los partidos en las canchas de Colón y Unión a los que concurrían grandes cantidades de gente. En el club Unión de Santa Fe, donde se enseñaba boxeo, comenzó a interesarse por este deporte. En su adolescencia trabajó como canillita, sodero, lechero, entre otros empleos. Monzón siempre buscó ayudar a su familia a través del trabajo para sortear la pobreza en la que vivían.
El primer combate de Carlos Monzón como amateur fue el 2 de octubre del año 59. Peleó en esta categoría hasta diciembre de 1962, cuando se convirtió en boxeador profesional de peso medio. Su entrenador y mentor fue Amílcar Brusa, quien tuvo un gimnasio en Barranquitas Este y que falleció el 27 de octubre de 2011. Brusa lo acompaño durante toda su carrera en el boxeo, y en gran medida, fue el sostenedor del éxito de Monzón como deportista. Cuando comenzó a entrenar a Monzón, éste tenía siete peleas como aficionado y había perdido dos combates, y con Amilcar Brusa Carlos realizó varias peleas como amateur.
El 6 de febrero de 1963 debutó como boxeador profesional contra Ramón Montenegro, a quien derrotó por Knock Out. A partir de 1965 comenzó a despegar en el deporte con varias victorias. El 1° de febrero de 1966 se consagró campeón provincial de peso mediano. El 3 de septiembre del mismo año ganó en el Luna Park contra Jorge Fernández para obtener el título de Campeón Argentino de Peso Mediano. Luego del campeonato construyó su propia casa para su familia y al año siguiente, en 1967, se consagró, también derrotando a Fernández, como Campeón Sudamericano de Peso Mediano.
Bajo la representación del mánager Juan Carlos “Tito” Lectoure, comenzó a disputar peleas internacionales, en su mayoría contra boxeadores estadounidenses. Finalmente, en su carrera hacia el título mundial, el 7 de noviembre de 1970 se enfrentó al italiano Nino Benvenuti en Roma y lo derrotó por KO en el duodécimo round. Así, se consagró Campeón Mundial de Peso Mediano de la Asociación y el Consejo Mundial de Boxeo. A partir de ello, defendió el título en catorce oportunidades contra los grandes boxeadores de aquellos tiempos. Se retiró invicto en 1977. Monzón realizó cien combates en su carrera profesional, de los cuales sólo perdió tres. Fue reconocido con el Premio Konex de Platino en el año ‘80 como el mejor boxeador de la historia argentina.
Carlos Monzón tuvo cinco hijos, el primero Carlos Alberto, hijo de Zulma Encarnación Torres, quien fue su pareja entre 1958 y 1961, luego Silvia, Abel y Carlos Raúl, con Mercedes Beatriz “Pelusa” García, y el menor Maximiliano Roque con Alicia Muñiz.
El sanjavierino tuvo participación en el cine argentino, con películas como La Mary, dirigida por Daniel Tinayre en 1974, co-protagonizada por Susana Giménez. Además participó en producciones cinematográficas como “Soñar, soñar”, “El macho”, “Un loco en acción”, entre otras.
El 14 de febrero de 1988 Monzón se encontraba en Mar del Plata con su pareja, Alicia Muñiz, a quien asesinó a golpes y luego la arrojó por el balcón de la casa que ocupaban. El boxeador fue condenado por homicidio simple en un juicio polémico y mediático, le otorgaron once años de prisión que cumplió en el penal de Batán en Provincia de Buenos Aires, luego en Junín y finalmente en la cárcel de Las Flores en la ciudad de Santa Fe. Cabe destacar que Carlos Monzón fue juzgado en tiempos donde no existía en el país la figura penal de “Femicidio” y sus agravantes pertinentes.
En el marco de las salidas transitorias, en el final del cumplimiento de su condena, Monzón comenzó a trabajar como entrenador de boxeo en el gimnasio de la Unión de Empleados Civiles (UPCN) en la capital provincial. En su retorno al penal en una de las salidas transitorias, al regresar de San Javier, el campeón mundial de boxeo tuvo un accidente automovilístico fatal en el kilómetro 51 de la Ruta Provincial N°1, a la altura de Los Cerrillos, el 8 de enero de 1995. Fue despedido por una multitud de casi 60 mil personas al día siguiente en el Cementerio Municipal de la ciudad de Santa Fe.
