Barrio San Lorenzo – Clubes

La primera cancha llegó en los primeros años de la década del 30’ y se encontraba delimitada entre las calles Amenábar, Entre Ríos, Juan Díaz de Solís y Roque Sáenz Peña. Allí, en un campito de aquellos años, comenzó a rodar la pelota y los sueños del barrio que en aquel entonces se llamaba Súnchales.

El club se dedicó de manera exclusiva al fútbol. Ya en sus primeros años, los “santos”, participaron del torneo de la Federación Santafesina de Fútbol, donde siempre fue protagonista, gracias a los equipos competitivos que formaba.

Por su cercanía, los clásicos de la Federación de San Lorenzo, fueron Chicago de barrio Alfonso y el club Central Centenario. El honor de los barrios se ponía en juego cada vez que estos equipos se enfrentaban.

En la década del 50’ el club, además de participar del torneo de la Federación, era parte de los campeonatos millonarios que organizaba Colón de Santa Fe. Una de las delanteras más próspera de San Lorenzo de aquellos años fue Pedro Utrera, Orlando Roa, Demetrio Gómez, Juan Martínez y “Pirincho” Sánchez. 

Pero más allá de ser parte de la Federación desde sus comienzos, recién en el año 1963, fue firmado el estatuto del club. Esto fue llevado adelante por quien en aquel momento era secretario del club, Higinio Veiga, y gracias a esto se logró la personería jurídica para San Lorenzo.

Los hermanos Pedro y Ricardo “Quito” Utrera, jugadores históricos del “santo”, hicieron un repaso de algunos de los nombres que vistieron la camiseta de San Lorenzo, entre ellos, el “Loco” Luis Ciaccia, Demetrio Gómez, Victorio Nicolás Coco y Orlando Roa. Todos vecinos de la institución.

Cada vez que jugaba San Lorenzo el barrio se vestía de fiesta y todos los vecinos se acercaban a disfrutar del fútbol. Era tal la cantidad de gente que asistía a la cancha, que los escuadrones de la policía por aquel entonces debían armar un perímetro en la misma cancha para que los hinchas no invadieran el campo de juego.

Para graficar lo que se vivía en aquellos partidos, Pedro Utrera, recordó un clásico frente a Central Centenario, el cual ganó el “santo” por 1 a 0 con un gol de taco del mismo Utrera. Cuando lo convirtió, la gente invadió el rectángulo de juego, y corrieron a abrazar al autor del gol, quien terminó con varios rasguños en medio de los festejos.

Pero además del fútbol, el club contó con las tradicionales peñas de barrio en las cuales, entre otros grupos, se presentaron en diferentes ocasiones Los Palmeras e incluso los Cuatro de Córdoba. Peñas que se caracterizaban por el disfrute de familias enteras del barrio que iban a pasar su tiempo libre al club.

Pero el club no solo participó de la Federación. Con el correr de los años, San Lorenzo logró ingresar a la Liga Santafesina durante mucho tiempo. Sin embargo, el peso económico que la liga tenía hizo que el club regrese a jugar en la Federación hasta que la misma cerró de forma definitiva, momento en el cuál, San Lorenzo, comenzó a vivir los momentos más difíciles, debido al mal maneje de algunos dirigentes que estuvieron a cargo del club.

Poco tiempo después, las puertas del club se cerraron. Sin embargo, en 2013, se conformó una nueva comisión directiva para que San Lorenzo pueda resurgir en las instalaciones que aún se encuentran en donde comenzó todo, Amenábar 3946.