Esta entidad, que tuvo participación en la Liga Santafesina, y con divisiones inferiores, contó con el apoyo y trabajo de algunos futbolistas profesionales, en su mayoría vinculados al Club Unión de Santa Fe, entre ellos, Martín “Patita” Mazzoni, Roberto Trotta y Matías Vidoz. Esta entidad, que fue la que ocupó primeramente el predio y construyó las canchas y dependencias edilicias, se organizó con una modalidad de club “a la europea”, con distintas áreas no tradicionales para otras entidades barriales. Incluso, como uno de los logros exhibidos por sus impulsores, allá por 2009, se destaca la visita a Santa Fe Fútbol Club de varios clubes de primera división del país para seleccionar e incorporar jóvenes, o niños, futbolistas a sus planteles surgidos de la cantera del tricolor.

Justamente, en una nota realizada por Ignacio Andreychuk para El Litoral en 2009, Mazzoni declaraba que “Estuvimos recibiendo muchos clubes a lo largo de este semestre: Estudiantes, Lanús y Banfield, entre otros, para que vengan a ver jugadores. Son pruebas de nuestros jugadores, gente que viene a ver los chicos de Santa Fe Fútbol”. Asimismo, el jugador destacaba en la entrevista de 2009 que “El club funciona hace tres años y siempre siguió progresando, tanto en los resultados obtenidos como en la formación de los chicos. Este año, tuvimos la posibilidad de que emigren varios pibes más a clubes importantes. Se están haciendo bien las cosas”. (El Litoral 10/1/2009)

En ese momento, Santa Fe Fútbol Club poseía 250 jugadores federados y unos 200 chicos en la escuelita. Asimismo, respecto del predio, la nota de El Litoral describía que tenía “…seis campos de fútbol profesionales. Además, las instalaciones que hay son: vestuarios independientes de local, árbitros y visitantes; consultorio médico, kinesiológico y fisioterapeuta; gimnasio; comedor; cabinas para televisión y radio; sala de entrenadores; utilería; sala de prensa y palcos VIP”.

Luego el Santa Fe Fútbol Club desapareció como entidad y el predio quedó como un espacio de alquiler de canchas para la práctica deportiva del balompié, bajo la denominación “La Quinta”.

Para enero de 2022 el Club Atlético Unión desembarcaba en el predio mediante el alquiler del espacio por unos tres años, en un principio. Con ello, los tatengues trasladaron su escuela de fútbol “Diego Barisone” y las prácticas de las divisiones inferiores a las cinco canchas disponibles entonces en el lugar. El acuerdo rubricado en 2022 por Unión posibilitaba la extensión de dos años más de alquiler, es decir, hasta 2027, pero con la declarada intención de adquirir el predio para asentarse definitivamente.