Teatro de Barrio
Los “coliseos” y “tablados” de la ciudad poblaron en general el espacio entre bulevares. Vinculados al “Centro”, desde el Teatro Municipal “1° de Mayo”, hasta los cines y salas de entidades con la alternativa de albergar en su escenario obras de teatro, se circunscriben en su mayoría geográficamente a zonas del sur, centro y este de la trama urbana.
Sin embargo, espacios teatrales en los barrios existen en lugares como vecinales, clubes, bibliotecas, y hasta escuelas con algún salón de actos con escenario. Pero hay una sala con todas las letras en el centro/norte de la ciudad, en el corazón de Barrio Belgrano. El “Teatro de la Abadía” tiene además de esa particularidad de ubicación la condición de ser un espacio cultural independiente, autogestionado, y barrial.
En primera persona, o como actores principales de su propia condición de artistas, los teatreros declaman su parlamento para contar su historia, sus objetivos, su sentir, desde Estanislao Zeballos 3074.
En su página Web mencionan: “Un 1° de septiembre del año 2000 abría sus puertas el Teatro de la Abadía. Abría sus puertas y desplegaba sus alas, comenzando a hacer realidad un sueño.
Unos meses antes, un teatrero –Walter Alemandi– que vivía (y sigue viviendo) “lejos del centro” convocó a otros teatreros de la ciudad para transformar entre todos el patio leñero de la panadería familiar en un espacio cultural. Trabajaron mucho. Y mientras trabajaban, también soñaban, se reían y bailaban.
Así fue que unos días antes de la primavera del año 2000, abrieron las puertas para compartir el sueño con toda la ciudad. Abrieron las puertas para invitar a pequeños y grandes a construir un mundo más humano. Abrieron sus puertas para que el juego y el arte sean la excusa perfecta para encontrarnos, conocernos y recrearnos”.
La Abadía posee tres salas: La “Antesala”, preparada para la realización de muestras y exposiciones, en donde funciona también la recepción y la boletería. La “18 Escalones”, de piso de cemento alisado, con una capacidad para 50 espectadores en sillas plásticas, que se describe como un espacio escénico variable adecuado para obras de pequeño formato. Finalmente, la sala “María Guastavino”, ubicada en la planta baja, con piso de cemento alisado, parrilla de luces, camarines con acceso directo y una capacidad de 130 butacas.
Espacio Cultural Independiente
En la difusión de su propuesta cultural, el “Teatro de la Abadía” expone en su página de Facebook los objetivos de su trabajo.
“Entre sus principales objetivos se encuentran la capacitación y perfeccionamiento artístico a través de seminarios, talleres y todo lo que contribuya al intercambio de experiencias e ideas; la producción, recepción y difusión de distintas expresiones estéticas; la conformación de un centro de investigación y experimentación y la realización de espectáculos de distintas disciplinas artísticas y culturales. También ocupan un importante lugar el diseño de proyectos que permitan implementar políticas de extensión; el establecer vínculos con otras entidades y el gestionar ante las autoridades la cooperación para concretar los objetivos trazados”.
También resumen la profusa actividad que han desarrollado: “Se llevan realizadas más de 1000 funciones con una concurrencia que ya superó los 50000 espectadores, habiéndose producido más de 100 estrenos en la sala. Grupos de todo el país y de países de habla hispana han mostrado su producción en eventos organizados en forma independiente o junto a diversas instituciones como el Instituto Nacional del Teatro, la Universidad Nacional del Litoral, las Secretarías de Cultura de la Municipalidad y de la Provincia y junto a grupos como Puro Cuento o Modus Vivendi, entre otros”.
En cuanto a la autogestión y la producción de los espectáculos describen que “El primer elenco con producción integral de la institución fue “El Resorte Teatro” en el año 2008 con una obra destinada a los niños. La segunda obra producida por la Abadía fue “Zapatones”, estrenada en el año 2012. La tercera producción fue “De tangos, ángeles y demonios” que se estrenó en el 2013 junto al Grupo Cuenteros del Horizonte. En el año 2014 nace el grupo “Comediantes de la Abadía”, integrado por alumnos avanzados de los talleres de teatro, estrenando la obra “Se casa la vecina” con gran repercusión y concurrencia de espectadores.
En el año 2015 se sumaron el “Grupo de la Abadía” con la obra “Show” y el “Grupo La Reja” con la obra “Rotos de amor”, que desde el año 2013 se integró a la institución. Estas dos últimas cuentan con el apoyo del Instituto Nacional del Teatro. Las producciones abarcan desde la elección, adaptación o creación de la dramaturgia; el espacio y los tiempos necesarios para los ensayos, la escenografía, el vestuario, el diseño gráfico, lumínico y sonoro, como también la difusión y la permanencia en cartelera de los espectáculos”.
La programación y talleres, junto con otras informaciones, se publican en su sitio de Internet (http://teatrodelaabadia.com.ar/)
Antes de hacer mutis por el foro, y bajar el telón final, vale la pena dar la palabra protagonista al actor principal de esta obra cultural autogestionada independiente en Barrio Belgrano, cerca de Don Bosco. Con postura de orgullo, y en forma colectiva, a viva voz, expresan en el frontis del escenario: “Gracias a todos y a cada uno de los que en estos años decidieron atravesar esas puertas para animarse a jugar. A todos y cada uno de los que aportaron su arte, sus ilusiones, sus proyectos y su presencia en esta casa con ‘olorcito a pan caliente’”. Aplausos de pie.