Natalio Cataudella, alma de corredor
Uno de los vecinos de 9 de Julio fue don Natalio Cataudella, personaje rememorado no sólo en el barrio sino en toda la cuidad y fuera de ella. Inmigrante italiano, nacido el 13 de septiembre de 1906 en el pueblito de Spacafarne, Siracusa, llegó de niño a la Argentina, antes de la Primera Guerra Mundial. Finalmente se afincó en Santa Fe, más precisamente, en pasaje Rodríguez y Pedro Centeno. Mecánico de profesión, apasionado por las carreras de autos, tuvo un taller en 1° de Mayo y Bulevar Pellegrini con un socio, pero también en el propio Barrio 9 de Julio, en Facundo Zuviría al 4300, donde está ahora la iglesia de Fátima.
“Ma que no yeve nada más que alambre…”, recuerdan que decía Cataudella, ataviado con un mameluco y las manos siempre manchadas de grasa y aceite. Y era así, a su carencia de recursos y repuestos muchas veces la suplía con su ingenio de artesano de los “fierros”. Para poder correr armó su propio auto, o en otras ocasiones usó algún bólido hecho a pedido, como el que le construyó en 1949 Fermín Brandolini, un auto de fórmula uno “fuerza libre”. José Chiapara, antiguo vecino, rescataba de su memoria que cuando don Natalio salía a probar el auto de carreras por Facundo hacía tanto alboroto que “…hasta los perros se subían a los árboles”.
En un artículo titulado “El Rey de los Líricos del Volante” en un sitio web sobre carreras y corredores, se hace mención que “Si uno quiere ubicar el coche de don Natalio Cataudella en alguna fotografía amarillenta de una grilla de largada de Mecánica Nacional, seguro que lo encontrará en una de las últimas posiciones”. Apasionado amateur, Natalio incluso armó autos de carrera con don Domingo Ochotecco (padre) quien fuera profesor en la Escuela Industrial Superior. Pero como se menciona en el referido escrito, “Para don Natalio el asunto era correr. No le importaba que sus rivales fueran mucho más rápidos. Ejercía su vocación como deporte puro: competir”. Pese a ese espíritu, y dados sus resultados, en los que muchas veces no llegaba a la meta por no contar con repuestos de piezas que se le rompían, Cataudella era objeto de bromas en las publicaciones y en el ambiente de la época. Sin embargo esas chanzas no amilanaban sus ganas de construir autos y correrlos.
Don Natalio compitió en Esperanza, Sunchales, Las Rosas, San Nicolás, Santo Tomé (donde lo recuerdan por doblar en las esquinas de la plaza en dos ruedas) y nunca faltó en Rafaela, en el óvalo cuando era de tierra. Un par de anécdotas hablan de este vecino “tuerca” de Barrio 9 de Julio. Una vez, al salir de boxes, le advirtieron: “Don Natalio, ¡el motor pierde aceite!”, la respuesta fue obvia: “Ah, bueno, si pierde es porque tiene”. En otra ocasión, durante una edición de las 500 Millas en Rafaela, allá por los sesenta, varias personas formaban cola para ir a uno de los retretes de campaña al costado de los “boxes”. Entre los urgidos por la necesidad, en la mitad de la fila estaba don Natalio esperando su turno para luego subirse al auto y continuar la carrera. Dicen que cuando le insistieron que fuera adelante en la cola aceptó “un poco incómodo”.
Entre algunos datos se puede mencionar que en las pruebas de clasificación de las 500 Millas Argentinas de Rafaela de 1959 don Natalio se ubicó undécimo, a doce segundos de Jesús Ricardo Iglesias que partió primero en la grilla con un Chevrolet Wayne. Esa vez dejó atrás en la clasificación, entre otros, a José Froilán González (con un Ferrari-Corvette), aunque después tuvo que abandonar y no terminó la carrera por desperfectos mecánicos. Las mejores actuaciones de Natalio Cataudella luego de su debut en 1941 en el Gran Premio de la República Argentina fueron: 1942: 5° en Santa Fe – 1951: 3° en Tucumán y en Paraná, y 5° en Esperanza – 1952: 4° en Rosario y 5° en el Autódromo de Buenos Aires – 1953: 10° en Rosario – 1954: 8° en Vicente López Automóvil Club (en la Panamericana) – 1958: 5° en Esperanza – 1959: 4° en Marcos Juáre – 1966: 13° en las 500 Millas de Rafaela – 1967: 10° en Esperanza. (“El Rey de los Líricos del Volante” – Federico Kirbus)
Cataudella se despidió de las pistas en 1967, en el circuito de “Los Toboganes” de Esperanza. Y definitivamente, un 1° de agosto de 1989, en Paraná, le dieron la bandera verde de largada para que don Natalio alcanzara en otros mundos el peldaño más alto de ese podio soñado en su taller de Facundo Zuviría.
Hola. Los felicito por esta iniciativa de dejar plasmadas historias de nuestra querida ciudad de Santa Fe y sus barrios.
Yo vivi desde nina en el barrio de Fomento de 9 de julio. Mis padres, mis abuelos y bisabuelos vivieron alli, a media cuadra del corredor de autos don Cataudella. Mi abuelo paterno, don Arturo Omisino Garcia fue una persona muy respetada. El emigro con su padre, madre y hermanos de Candas, Asturias, y vino a vivir a Santa Fe cuando tendria unos 5 anios. Se caso con mi abuela, Clementina de Pedro, que ya vivia en este mismo barrio. Clementina emigro a Santa Fe a la edad de 2 anios junto con sus padres (Francisco de Pedro Peiroten y Gabriela Cobaleda de Miguel) y dos hermanos. Ellos eran de la Provincia de Burgos, Espana. Muchos descendientes de los de Pedro viven aun en este barrio todavia.
Volviendo a mi abuelo Omisino, el trabajaba en el diario El Litoral y fue el primer secretario general del gremio de los trabajadores de la imprenta. Trabajaba en el Diario para sustentar a su familia y fuera de las horas de su trabajo, cumplia con su funcion de gremialista, sin recibir ningun tipo de remuneracion. Trabajo incesantemente para mejorar las condiciones de trabajo de sus companeros. Lastimosamente, fallecio joven de un cancer de pulmon a los 47 anios. Su hijo y mi padre, el ingeniero Ruben Garcia, todavia vive en este barrio. El jugaba al basquetbol en el Club Sporting y y tambien era campeon de atletismo (carrera de 10 metros y salto en largo, salto con garrocha, etc.).
EN el bario habia un almacen que todos frecuentabamos, Era el almacen de Dona Pepa, en Pedro Centeno entre Pasaje Rodriguez y Urquiza. Por muchos anios Dona Pepa Vona y su familia y hermanos (Maria Vona y Gaetano Vona) ademas del almacen de P. Centeno 3374, tambien tenian la soderia Vona (P. Centeno 3393) y la zapateria Noi, Actualmente sus descendientes tienen una ferreteria «Bella Italia» y un supermercado sobre Facundo Zuviria (junto a la estacion de servicio, en Fdo Zuviria y Pedro Ferre). Gaetano Vona se caso con una hermana de mi abuela Clementina, Libertad de Pedro.
Cuando yo era chica, tambien participaba de las actividades de Fomento 9 de Julio. Alli iba a practicar gimnasia, a ver espectaculos, hacer Karate, visitar la biblioteca, etc.
En la foto que tienen del bar El Gringo Negro, la ultima de la derecha donde se ve una canilla, esta mi otro abuelo, mi abuelo materno, Antonio Cesar Cabanellas. El es el primero de la izquierda en la foto, el que esta con la canilla. El y su padre, Juan Cabanellas, tenian una peluqueria en la esquina sur oeste de Boulevard Galvez y 25 de Mayo. Mi bisabuelo Juan Cabanellas era un inmigrante proveniente de Pollensa, Isla de Mallorca, Baleares, Espana, que emigro junto con su madre Juana Vives y padre Antonio Cabanellas, En fin, muchas historias, Si me acuerdo de mas les cuento.
Saludos.
¡Hola, Claudia!
Gracias por tu comentario y la información aportada,
Santa Fe Mi Barrio es un proyecto colectivo para reconstruir entre todos la historia de nuestros barrios.
¡Estamos agradecidos de que seas parte!
Gracias por contar la historia de mi bisabuelo! Los felicito
Gracias, Juan Francisco! Es un honor para nosotros contar la historia de quienes hicieron grande a Santa Fe.
Te invitamos a que sigas recorriendo la historia de los barrios de la ciudad, Santa Fe Mi Barrio es un proyecto colectivo para reconstruirla entre todos. En el caso de contar con información que consideres relevante, podés realizar tu aporte.
Tengo un vecino que de niño aprendió mecánica gracias a él , una historia muy linda , hoy en día le mostre la nota y recordó con mucha alegría esas épocas ♡
Gracias Gisela por tu mensaje, es la idea de Santa Fe mi Barrio rescatar la historia de los barrios y de los recuerdos de los vecinos de Santa Fe. Abrazo santafesino